Tartamudeo

¿Qué es el tartamudeo?

El tartamudeo es un trastorno del habla en el cual los sonidos, sílabas o palabras se repiten o duran más tiempo de lo normal. El flujo normal se interrumpe mediante repeticiones frecuentes, por la prolongación de sonidos, sílabas o palabras, o por la dificultad para comenzar una palabra. Las interrupciones pueden estar acompañadas de guiños de los ojos o muecas de la cara o de otra parte superior del cuerpo, en un intento por hablar.

Ciertas situaciones, como hablar frente a un grupo de personas o por teléfono, tienden a hacer que el tartamudeo sea más intenso. Otras situaciones, como cantar o hablar solo, a menudo lo mejoran.

¿Qué causa el tartamudeo?

Se sospechan diferentes causas. Hay razón para creer que muchas formas de tartamudez se determinan genéticamente, pero todavía no se entienden ni se conocen los procesos que causan el desorden. Aproximadamente el 5% de los niños (1 de cada 20 niños) en edades de entre 2 y 5 años desarrollan algo de tartamudeo durante su infancia y esto puede durar desde varias semanas a varios años.

Para un pequeño número de niños (menos del 1%), el tartamudeo no desaparece y puede empeorar. Esto se denomina tartamudeo del desarrollo y es el tipo más común de este problema.

También existe evidencia de que el tartamudeo puede ser el resultado de algunas lesiones cerebrales, como un ictus o lesiones cerebrales por un traumatismo. En este tipo de tartamudez, el cerebro no puede coordinar adecuadamente los diferentes componentes del mecanismo del lenguaje.

En algunas ocasiones, pero muy infrecuentemente, puede ser causado por un trauma emocional (denominado tartamudeo psicogénico).

El tartamudeo es más común en niños que en niñas e igualmente tiende a persistir hasta la edad adulta con más frecuencia en los hombres que en las mujeres.

Síntomas

El tartamudeo puede empezar con la repetición de consonantes (k, g, t). Si el tartamudeo empeora, se repiten palabras y frases. Puede parecer como si la persona estuviera luchando para hablar.

Las situaciones sociales estresantes y la ansiedad pueden hacer que los síntomas empeoren.

En algunas ocasiones las personas afectadas pueden sentirse frustradas al intentar comunicarse, hacen pausas o dudan al empezar o durante las oraciones, frases o palabras. Con frecuencia, repiten sonidos, palabras, partes de palabras o frases (“yo quiero… yo quiero mi muñeca”, “yo… yo te veo” o “Pue-pue-puedo”) con los labios juntos y sonidos muy largos dentro de las palabras (“yo soy Luuuuuuis Perez” o me “guuuuuusta”)

Los niños con tartamudeo leve son a menudo inconscientes de su problema. En los casos más graves, los niños pueden ser más conscientes.

¿Cómo se diagnostica el tartamudeo?

Usualmente no se necesita ningún examen.

El tartamudeo en general es diagnosticado por un fonoaudiólogo, un profesional que está educado especialmente para evaluar y tratar a individuos con trastornos de la voz, el habla y el lenguaje. El diagnóstico se basa generalmente en la historia del trastorno, como por ejemplo, cuándo se notó por primera vez y bajo qué circunstancias, así como una evaluación completa del habla y las capacidades del idioma.

Tratamientos

Hay una variedad de tratamientos disponibles para la tartamudez. Cualquiera de los métodos puede mejorar la tartamudez. La terapia puede ayudar a impedir que el desarrollo del trastorno se convierta en un problema de por vida. Por consiguiente, se recomienda una evaluación de la habilidad para hablar en todos los niños que tartamudean durante más de 6 meses o en aquellos en los cuales la tartamudez está acompañada de comportamientos de esfuerzo.

El desarrollo de la tartamudez es a menudo tratado educando a los padres sobre la reestructuración del ambiente donde se desarrolla el habla del niño para reducir los episodios de tartamudez. Se alienta a los padres a:

• Ofrecer un ambiente relajado en casa que proporcione la oportunidad para que el niño participe con su lenguaje. Establecer una hora concreta del día para que los padres y los hijos pueden hablar libres de distracciones.
• Abstenerse de criticar o reaccionar de forma negativa a los problemas de lenguaje del niño. Los padres deben evitar castigar a los niños por la falta de fluidez en el habla o pedirles que repitan las palabras tartamudeadas hasta que se hablen con naturalidad.
• Escuchar atentamente al niño cuando esté hablando.
• Hablar lentamente y de una manera relajada. Si los padres hablan de esta manera, el niño también podría seguir el ejemplo y hablar de una manera lenta, relajada.
• Evitar decirle al niño que hable más lento o que piense en lo que va a decir antes de hablar.
• Esperar a que el niño diga la palabra que está pensando. No tratar de completar los pensamientos del niño.
• Conversar abiertamente con su hijo sobre el tartamudeo si es que éste le presenta el tema. Actualmente muchos programas populares de terapia para la tartamudez persistente ponen énfasis en volver a aprender el habla y en olvidar la forma en la que se aprendió a hablar. Los efectos psicológicos colaterales del tartamudeo que ocurren con frecuencia, como por ejemplo el temor a hablar a desconocidos o en público, también se abordan en la mayoría de estos programas.Los medicamentos que afectan la función cerebral a menudo tienen efectos secundarios que los hacen difíciles de usar como tratamiento a largo plazo y no han demostrado ser de utilidad.
• Otras formas de tratamiento son los medicamentos o los dispositivos electrónicos.

Los dispositivos electrónicos que ayudan a controlar la fluidez de las palabras pueden ser más una molestia que una ayuda en la mayoría de las situaciones y son a menudo abandonados por las personas que tartamudean. No está claro si los dispositivos electrónicos ayudan con el tartamudeo.

También existen métodos no convencionales como terapia para el tartamudeo. Es siempre una buena política comprobar las credenciales, la experiencia y las metas del tratamiento que se ofrecen a las personas. Evite trabajar con alguien que promete una “cura total” para la tartamudez.

Los grupos de autoayuda a menudo son útiles tanto para el niño como para la familia.

¿Cuál es el pronóstico del tartamudeo?

En la mayoría de los niños que tartamudean, la tartamudez es pasajera y el habla vuelve a ser normal al cabo de 3 o 4 años. El tartamudeo que comienza después de que el niño tenga de 8 a 10 años es más probable que perdure hasta la edad adulta.

¿Existen prevenciones?

No existe una forma de prevención conocida para el tartamudeo.

Consulte con el médico si:

• El tartamudeo está interfiriendo con el desarrollo emocional o el rendimiento escolar de su hijo
• El niño parece ansioso o se siente avergonzado al hablar
• Los síntomas duran más de 3 a 6 meses