¿Qué es la lengua geográfica?
La
lengua geográfica es un trastorno inflamatorio, no ofensivo, que afecta y aparece en la superficie de la lengua. La patología se manifiesta mediante pequeños bultos de color blanco rosáceo que son proyecciones cortas y finas. Se trata, concretamente, de la
aparición de ‘islas’ rojas y lisas, a menudo en los bordes y levemente elevados.
Cuando aparece la enfermedad, esas zonas quedan sin papilas, dejando la lesión con una
apariencia geográfica, como si de un mapa se tratara. En ocasiones, dichas lesiones se curan en una parte de la lengua, pero posteriormente aparecen nuevas en otra localidad de la misma.
Esta afectación no se trata de
ninguna patología problemática para la salud de quien lo padece, ni se relaciona con las infecciones o el cáncer. No obstante, la lengua geográfica puede producir molestias en la misma y una sensibilidad mayor a ciertas sustancias como, por ejemplo,
la sal, las especias o incluso los dulces.
Síntomas de la lengua geográfica
Los
signos y síntomas de la lengua geográfica pueden ser las siguientes:
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Lesiones lisas, rojas, de forma irregular como manchas en la parte superior de la lengua.
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Cambios frecuentes en la ubicación, el tamaño y la forma de las lesiones.
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Molestias, dolor o sensación de ardor en ciertos casos a la hora de ingerir alimentos picantes o ácidos.
Sin embargo, muchas de las personas que padecen estas lesiones no sufren síntoma alguno. En cuanto a su duración, la lengua geográfica
puede manifestarse durante días, meses o años. Generalmente, la lesión desaparece por sí sola, aunque pueda volver a ‘resurgir’ más adelante.
¿Cuáles son las causas de la lengua geográfica?
Si bien a día de hoy
se desconoce la causa de esta patología y no hay forma de prevenirla, es posible que exista un vínculo entre la lengua geográfica y
la psoriasis o el liquen plano. Pero, para ratificar dichas corrientes de pensamiento, se necesita más investigación para terminar de comprender sus posibles conexiones.
Por otro lado, los factores que pueden estar relacionados con un mayor riesgo de padecer la patología son los
antecedentes familiares y la lengua escrotal. En cuanto a la primera, la respuesta está en los
factores genéticos hereditarios, pues pueden aumentar las posibilidades de padecer la lesión. En cuanto a la segunda, quienes sufren lengua geográfica, en ocasiones, padecen a su vez otro trastorno llamado lengua escotral, por la cual la lengua presenta también
surcos profundos o fisuras.
Complicaciones de la lesión
Se trata de una
enfermedad benigna que no representa una amenaza para la integridad sanitaria de quien la padece, que no causa complicaciones futuras ni aumenta el riesgo de padecer problemas de salud graves. Sin embargo, las personas que sufren esta afección suelen presentar
signos de ansiedad por creer que la lesión puede derivar en algo grave o por el aspecto de la lengua, pues las manchas pueden que sean visibles.
Aunque esta información ha sido redactada por un especialista médico, su edición ha sido llevada a cabo por periodistas, por lo que es un contenido meramente orientativo y sin valor de indicación terapéutica ni diagnóstica. Recomendamos al lector/a que cualquier duda relacionada con la salud la consulte directamente con el profesional del ámbito sanitario correspondiente.