Diccionario de enfermedades

Hidrocefalia

Hidrocefalia

¿Qué es la hidrocefalia?


La hidrocefalia es un trastorno que consiste en un acúmulo excesivo de líquido cefalorraquídeo dentro de la cabeza. Este trastorno se conocía antiguamente como agua en el cerebro, aunque este líquido no es agua, sino que es líquido transparente que rodea el cerebro y la medula espinal. El líquido cefalorraquídeo protege y amortigua el cerebro, pero en exceso aumenta el tamaño de los ventrículos y ejerce una presión dañina para el cerebro.

Tipos de hidrocefalia


Según el mecanismo de producción se pueden considerar dos: hidrocefalias comunicantes o hidrocefalias no comunicantes. En las primeras, el líquido cefalorraquídeo se forma adecuadamente y fluye correctamente, pero existe un trastorno de la reabsorción. Por su parte, en las segundas, la hidrocefalia se debe a que el líquido cefalorraquídeo no circula a través de algún punto de su recorrido debido a una obstrucción.

Síntomas de la hidrocefalia


La hidrocefalia puede producirse a cualquier edad, pero los síntomas son diferentes en bebes, niños y adultos.
  • En bebés, los signos de la hidrocefalia más frecuentes son un aumento rápido del tamaño de la cabeza o un abultamiento o una fontanela en la parte superior de la cabeza. En cuanto a los síntomas, náuseas y vómitos, somnolencia, irritabilidad, alimentación deficiente o convulsiones.
  • En niños, la mayoría de veces la hidrocefalia se debe a malformaciones congénitas, y los síntomas más frecuentes son aumento del tamaño de la cabeza, retraso del crecimiento, dolor de cabeza, vómitos, somnolencia excesiva y alteraciones de la mirada.
  • En adultos, la hidrocefalia puede aparecer de forma brusca o gradual, y se manifiesta como dolor de cabeza acompañado de vómitos, alteraciones visuales y de la mirada, y deterioro del nivel de conciencia.

Complicaciones y tratamiento de la hidrocefalia


En la mayoría de los casos, la hidrocefalia puede causar complicaciones, como discapacidades intelectuales, del desarrollo y físicas, si no se trata. Incluso, sin tratamiento puede llegar a ser mortal.

Por ello, el tratamiento consiste en una operación de la hidrocefalia en que se pretende extraer el exceso de líquido cefalorraquídeo acumulado dentro de la cabeza. En general se opta por los sistemas de derivación o válvulas.

La válvula es un sistema integrado por varios catéteres que llevan el líquido desde los ventrículos cerebrales a otra cavidad del organismo donde se reabsorbe.
Aunque esta información ha sido redactada por un especialista médico, su edición ha sido llevada a cabo por periodistas, por lo que es un contenido meramente orientativo y sin valor de indicación terapéutica ni diagnóstica. Recomendamos al lector/a que cualquier duda relacionada con la salud la consulte directamente con el profesional del ámbito sanitario correspondiente.