Fisura anal

Una fisura anal es una pequeña herida en el esfínter anal, el esfínter que controla la salida de las heces. Puede aparecer a cualquier edad, y es la primera causa de sangrado rectal (a través del ano) en niños. Con frecuencia una fisura anal puede ser confundida por un paciente con unas hemorroides.

¿Cuáles son las causas de una fisura anal?

Las fisuras anales se asocian con:

• el estreñimiento
• la diarrea
• la enfermedad de Crohn.
• Pueden también observarse al final del embarazo o tras el parto.

¿Qué síntomas produce?

El síntoma típico de la fisura anal es el dolor al hacer de vientre o inmediatamente después; el dolor puede durar de minutos a horas. Puede haber también sangrado rectal, que es de menor cuantía que el producido por las hemorroides.

El dolor de la fisura anal al hacer de vientre favorece el estreñimiento, el cual empeora la fisura, lo cual puede convertirse en un círculo vicioso.

¿Cómo se diagnostica?

La fisura anal se diagnostica mediante la inspección del ano por parte del médico.

¿Cuál es el tratamiento de una fisura anal?

El tratamiento de la fisura anal consiste en:

• Evitar el estreñimiento mediante la realización de una dieta rica en fibra y/o con laxantes que aumenten el volumen de las heces: Psyllium (Plantaben®, Metamucil®) o metilcelulosa (Muciplazma®), consumo de abundante líquido y realización de ejercicio físico regular.
• Realizar baños de asiento (con agua templada o caliente) de 10 minutos de duración, al menos 3 veces al día. No se debe añadir ninguna sustancia al agua. Sirven para relajar el esfínter anal.
• Utilizar pomadas con analgésicos o con corticoides.
• Las fisuras crónicas (de más de 6 semanas de duración) pueden requerir:

• la utilización de medicinas que relajen el esfínter anal (pomadas de nifedipino o de diltiazem, crema de nitroglicerina o crema de dinitrato de isosorbide, aplicadas 3 veces al día).

• la inyección de toxina botulínica o, si no hay respuesta después de varios meses

• tratamiento con cirugía. La cirugía de la fisura anal suele dar muy buenos resultados aunque puede producir incontinencia fecal (salida sin querer de las heces) en algunos pacientes.

En general el 90% de las fisuras ceden con tratamiento médico sin que se precise llegar a la cirugía.

¿Cómo se puede tratar la irritación del ano?

En muchos pacientes con fisura anal puede haber irritación alrededor del ano. En estos casos se recomienda:

• Limpiar el ano y su alrededor después de cada deposición con agua tibia (sin jabón) o con toallitas húmedas. El papel higiénico y el uso de jabones pueden irritar más la zona.
• Dejar secar al aire o secar con una toalla sin irritar la zona.
• Aplicar una crema hidratante que no irrite.
• Puede intentarse la utilización de polvos de talco para evitar las molestias en la zona.
• Utilizar ropa interior de algodón que no vaya muy apretada sobre la zona anal