Diccionario de enfermedades

Enfermedad por virus Ébola

¿Cómo se transmite el ébola?
La fiebre hemorrágica por virus Ébola es una enfermedad infecciosa producida por un virus de la familia Filoviridae. Dicha infección se encontraba localizada en algunos países africanos, si bien se han descrito algunos casos en países occidentales a partir de viajeros procedentes de áreas de riesgo y del contagio del personal sanitario. Esta enfermedad tiene una altísima mortalidad sin que se disponga hasta la fecha de tratamiento eficaz para la misma.

Causas del ébola


Se trata de una infección por un virus denominado Ébola. El virus pertenece a la familia de los Filoviridae. Al parecer es originariamente un virus animal, transmitido a los humanos por el consumo de su carne y el contacto con su sangre o fluidos corporales. Este virus se conoce desde hace más de 20 años habiéndose descrito varios brotes de la enfermedad en áreas rurales africanas. En 2014 por primera vez, se detectaron casos en una capital de un país africano (en concreto en la capital de Guinea Conakry) lo que supuso un mayor riesgo para la extensión de la enfermedad. Durante 2014 se han notificado casos sospechosos o seguros en Guinea Conakry, Liberia, Mali, Senegal y Sierra Leona.

¿Cómo se transmite el ébola?


La vía principal de contagio parece producirse a través de las secreciones de pacientes ya enfermos (sangre, vómitos, orina, heces, sudor, etc.), sobre todo en las fases finales de la enfermedad. Por tanto, el paciente debe haber tenido síntomas para poder transmitir la enfermedad.

Los nuevos casos que pueden aparecer en un país occidental procederían:
  • De una persona infectada y enferma que llegue al país.
  • De una persona infectada pero que no haya enfermado aún (portador asintomático) que llegue al país. Debe haber tenido contacto con una persona enferma en los 21 días previos.
  • Del contagio desde una persona enferma que ya se encuentre en el país (en general personal sanitario).
Para que la enfermedad pueda contagiarse es necesario que ocurran las 2 siguientes circunstancias:
  • Que exista contacto con los fluidos corporales, es decir, con las heces, la sangre, los vómitos y, en menor medida, la orina, el sudor, la saliva, el semen, las lágrimas o la leche materna, de una persona enferma. Es posible que la enfermedad pueda también transmitirse a partir de los fluidos de animales infectados. Este contacto puede ser:
  1. Directo. La persona contacta directamente con los fluidos de la persona enferma (con alguna parte del cuerpo, al besar o al mantener relaciones sexuales), o le salpican directamente dichos fluidos (por un vómito, un estornudo o por la tos).
  2. Indirecto. La persona tiene contacto con los fluidos a través de vías intermedias: por compartir comida o bebida, a través de guantes, ropa, jeringas u otros objetos que estén contaminados con los fluidos del enfermo. Cuanta mayor sea la contaminación, más virus habrá en el objeto y mayor será el riesgo de contagio. No está claro cuánto tiempo puede mantenerse el virus vivo en estos objetos intermedios.
  • Que el virus que se haya adquirido por el contacto penetre en el organismo. Esto puede producirse a través de la boca, la nariz, los ojos, los genitales (mucosas) o a través de heridas en la piel. El virus puede penetrar directamente a través de una de estas mucosas (por un beso, por salpicaduras de saliva o por un vómito en los ojos, etc.), o porque la persona se toque alguna de estas partes de su cuerpo con otra zona de su cuerpo contaminada (generalmente tocarse los ojos con la mano, morderse las uñas, etc.). El virus no penetra a través de la piel íntegra.
La enfermedad no puede contagiarse a través de:
  • El aire.
  • Los alimentos en general.
  • El agua.
  • Por haber estado cerca o sentado al lado de una persona infectada si no ha habido contacto con sus secreciones.
  • No existen evidencias de que pueda trasmitirse a través de mosquitos.
Una persona que haya pasado la enfermedad no puede transmitirla posteriormente. Existe constancia, sin embargo, de la eliminación del virus por el semen durante los 3 meses posteriores a la curación. Por este motivo se deben prohibir las relaciones sexuales durante este periodo de tiempo.



¿Qué síntomas produce la enfermedad?


El tiempo transcurrido desde el contacto con el virus hasta la aparición de los primeros síntomas (período de incubación) oscila entre 3 y 21 días. Los síntomas de la enfermedad son inespecíficos y se parecen a los de cualquier otra enfermedad vírica, si bien su evolución es grave y frecuentemente mortal. La enfermedad produce:
  • Fiebre alta.
  • Dolores musculares.
  • Debilidad.
  • Dolor de cabeza.
  • Dolor de garganta y tos.
  • Hemorragias en la piel y otras zonas del organismo.
  • Vómitos y diarrea.
  • Sarpullido en la piel.
  • Fracaso del riñón, del hígado y muerte.
La tasa de letalidad (el porcentaje de personas que mueren tras contraer la infección) es altísima, situándose entre el 60 y el 80%, es decir, de cada 10 personas que se infectan, entre 6 y 8 fallecen.

¿Cómo se diagnostica?


El diagnóstico de sospecha se basa en datos clínicos y epidemiológicos. Los datos clínicos de sospecha requieren:
  • Fiebre mayor de 38ºC y, al menos, 2 de los siguientes síntomas:
  • Dolores musculares
  • Dolor de cabeza.
  • Dolor de garganta.
  • Vómitos.
  • Algún tipo de sangrado.
Los criterios epidemiológicos requieren:
  • Haber estado en los 21 días previos en una zona donde haya habido casos de infección por virus Ébola o
  • Haber tenido contacto con un caso sospechoso o demostrado de infección por virus Ébola.
La enfermedad se confirma con análisis específicos de sangre (PCR del virus).

¿Puede prevenirse el contagio?


No se dispone en el momento actual de ninguna vacuna para prevenir la enfermedad aunque existen muchas en investigación. La única manera de no contagiarse es evitar el contacto con personas infectadas, fundamentalmente con sus secreciones.

Cualquier persona en contacto estrecho con un caso sospechoso de padecer la enfermedad, debe mantenerse en observación durante 21 días y contactar inmediatamente con los servicios médicos si apareciera algún síntoma de infección. Los contactos estrechos no tienen por qué limitar su actividad.

El personal sanitario en contacto con estos pacientes debe tomar medidas de protección de transmisión aérea y de contacto lo que implica gafas, mascarilla, guantes y batas desechables. Todo el material utilizado por el paciente debe ser desechable.

¿Cuál es el pronóstico de los enfermos?


Actualmente su pronóstico es malo.

¿Cuál es el tratamiento del ébola?


No se dispone actualmente de ningún tratamiento. Los pacientes deben mantenerse en una habitación aislada en un Hospital y el único tratamiento es el de soporte. Se están utilizando tratamientos experimentales con anticuerpos dirigidos frente al virus, procedentes de personas que han sobrevivido a la enfermedad o de animales previamente infectados.
Aunque esta información ha sido redactada por un especialista médico, su edición ha sido llevada a cabo por periodistas, por lo que es un contenido meramente orientativo y sin valor de indicación terapéutica ni diagnóstica. Recomendamos al lector/a que cualquier duda relacionada con la salud la consulte directamente con el profesional del ámbito sanitario correspondiente.