La colocación del bebe al dormir se ha asociado con el riesgo de muerte súbita del lactante. Si bien esta entidad es infrecuente, el seguimiento de determinados consejos ha permitido reducir de forma importante la mortalidad del bebe en muchos países. Se deben seguir las siguientes recomendaciones al acostar al bebe:
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El niño debe dormir en su propia cuna. No debe dormir ni en la cuna con otros niños ni en la cama con adultos. Debe evitarse que duerma en sofás o sillones, o en sillitas o carritos de bebe. La utilización de sillitas en los coches salva vidas. Por este motivo es mayor el beneficio de que el niño vaya en una de estas sillas cuando está en el coche, que el riesgo de que pueda desarrollar una muerte súbita.
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El niño siempre debe acostarse boca arriba. No se le debe acostar ni de lado ni boca abajo. Es quizás la recomendación más importante. Cuando esté despierto y en presencia de un adulto se le puede colocar boca abajo.
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Debe dormir sin almohada y sin cojines a su lado.
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Debe dormir sobre un colchón firme. Se debe evitar ponerlos a dormir sobre alfombritas mullidas, colchones de agua, etc.
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Se debe evitar colocar sobre ellos mantas especialmente esponjosas, o con mucho pelo, o cojines.
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Se debe evitar taparles con ropa holgada. La sábana debe taparle firmemente por debajo de la cabeza y debe remeterse bien por debajo del colchón para evitar que le pueda cubrir la cara.
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La cabeza del niño debe quedar siempre destapada.
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No debe de haber en la cuna ningún peluche ni otros objetos blandos que puedan tapar sus vías respiratorias.
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Se debe evitar fumar en la casa donde haya un bebe.
Otros factores que podrían asociarse con un menor riesgo de muerte súbita del lactante, aunque no demostrados, son:
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El aumentar el tiempo de lactancia materna.
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El evitar las temperaturas demasiado elevadas en la habitación.
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La utilización de chupetes.
Aunque esta información ha sido redactada por un especialista médico, su edición ha sido llevada a cabo por periodistas, por lo que es un contenido meramente orientativo y sin valor de indicación terapéutica ni diagnóstica. Recomendamos al lector/a que cualquier duda relacionada con la salud la consulte directamente con el profesional del ámbito sanitario correspondiente.