San Fermín, visto desde los ojos de la alcaldesa y médica Cristina Ibarrola

Cogió el bastón de mando del Ayuntamiento de Pamplona hace menos de un mes y, casi sin tiempo para ordenar la casa, ya vive como máxima mandataria municipal las fechas más emblemáticas para sus vecinos: las fiestas de San Fermín. Cristina Ibarrola lideró, el pasado 28M, la lista de Unión del Pueblo Navarro, que recibió el apoyo mayoritario de los pamploneses. Médica de profesión, su dilatada experiencia laboral y política le avalaba. En el ámbito sanitario lo ha sido casi todo, entre otras cosas, directora de Atención Primaria del Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea (SNS-O), directora general de Salud del Gobierno de Navarra y directora-gerente del SNS-O. Nunca se ha quedado a ver los toros desde la barrera, aunque ahora lo hace desde una perspectiva diferente. Ilusión, según afirma, le sobra para afrontar el reto.

Casi recién llegada a la Alcaldía y le toca vivir San Fermín como protagonista. ¿Están siendo unas fiestas especiales para usted?

Sin ninguna duda. Vivir en primera persona como alcaldesa todas las fiestas de San Fermín está lleno de sensaciones emocionantes que difícilmente se pueden describir. Fundamentalmente me quedo con un momento: la procesión en el día grande para Pamplona. Fue inolvidable. Pero ha habido otros muchos momentos importantes: ver la Estafeta vacía justo antes del encierro, vivir junto al presidente de Osasuna y los jugadores el Chupinazo en el balcón del Ayuntamiento… Todo, también desde comer unos churros en La Mañueta, hacer el baile de la alpargata, ver los fuegos artificiales… Pero, sobre todo, me quedo con el cariño y el apoyo que me muestra la inmensa mayoría de la gente con la que me cruzo.

Ibarrola, acompañada de varios miembros del dispositivo de seguridad de uno de los encierros de San Fermín.

Una frase que suelen repetir los alcaldes y alcaldesas es que no hay cargo político más bonito que ese, por la cercanía con la gente. Usted que ya ha ocupado otros cargos previamente, ¿comparte esa reflexión?

Sí, en estas tres semanas que llevo como alcaldesa he vivido los momentos más gratificantes de toda mi trayectoria profesional. Soy médico de vocación desde que tengo uso de razón, aunque nadie de mi familia era médico, y me he dedicado muchos años a la gestión sanitaria. El paralelismo entre pensar en procesos de mejora para los pacientes y hacerlo para los ciudadanos es evidente. Ese es, de hecho, el salto cualitativo que tiene que dar la sanidad. Por todo ello, ser alcaldesa es muy gratificante: vivo de primera mano y de forma cercana los problemas, las inquietudes de los ciudadanos de la ciudad que amo, y siempre pensando en qué iniciativas emprender para mejorar Pamplona.

Recientemente destacó el buen transcurso de unas fiestas de tanta envergadura como estas, que requiere un dispositivo de seguridad y sanitario a la altura de las circunstancias. Usted que ya ha tenido esa experiencia como médica de Urgencias, ¿cómo lo vive ahora desde esta nueva posición?

Con mucha responsabilidad de que todo transcurra bien y de que no tengamos que lamentar sucesos relevantes. En una ciudad con tantos actos multitudinarios, algunos de riesgo como los encierros, siempre se vive con cierta tensión. Pero también lo experimento con muchísima confianza porque conozco muy bien el Servicio Navarro de Salud por dentro, y soy consciente de que sus profesionales saben perfectamente todo lo que tienen que hacer. Los encierros, sobre todo, son algo que está tan bien organizado desde hace tanto tiempo, que no hay secretos en este sentido para ellos.

La alcaldesa de Pamplona dialoga con el equipo de Cruz Roja.

Ni para ellos ni para usted, que también ha tenido muchos años esa responsabilidad en las fiestas. Además, no en vano se dice la cabra tira al monte, y usted misma estuvo en el dispositivo de seguridad del pasado domingo…

Efectivamente (ríe). Siendo todavía residente en el Hospital de Navarra tuve mi experiencia de atención en el encierro con Cruz Roja, y luego han sido muchas las veces en las que he tenido que trabajar en el encierro desde la perspectiva de la gestión sanitaria. Me apetecía muchísimo volver a rememorar eso, y lo hice encantada de la vida, apoyando a los compañeros y compañeras sanitarios a los que les toca estos días haciendo un trabajo duro.

Esa experiencia que cuenta que ha tenido al pie del cañón, ¿cómo va a servirle para desempeñar ahora su labor como alcaldesa?

Soy médica de familia y he trabajado en Urgencias y en Atención Primaria durante muchos años. Los sanitarios, en general, tenemos algo especial que nos acerca a las necesidades de las personas, y centrarse en eso es fundamental, al igual que lo es en el ámbito municipal. Además, llevo muchos años formándome y con experiencia en gestión sanitaria, en gestión de equipos, y en ese sentido los dos ámbitos se parecen mucho, así que estoy segura de que toda esa experiencia previa en atención sanitaria me va a servir para mejorar la vida de los ciudadanos.

Ibarrola participa en el dispositivo de seguridad para atender a un mozo.