Dolors Bassa, consejera de Trabajo, Asuntos Sociales y Familia; y Antoni Comín, consejero de Salud de Cataluña.
10 oct. 2017 13:00H
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Diez días después del referéndum, algunos más desde que comenzara la campaña electoral por la secesión y al borde de la DUI, los sanitarios catalanes tienen algo claro sobre sus demandas: “Todo está parado”. Así de claros se expresan fuentes del entorno sanitario autonómico cuando se les pregunta por el trabajo de la Consejería de Salud en las últimas semanas; una crítica que no solo centran en su titular, Antoni Comín, sino también en la consejera de Trabajo, Asuntos Sociales y Familia, Dolors Bassa. “Hay convenios pendientes de los que no sabemos nada”, aseveran. Una rutina que deja la puerta abierta a una duda: ¿Qué puede hacer este Govern para que sus empleados vuelvan a confiar en ellos…?
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