Pedro Azpiazu, consejero de Hacienda.
Euskadi ha dado un nuevo paso adelante en la
tramitación parlamentaria de su proyecto de presupuestos generales para el año 2024. El
Parlamento Vasco ha rechazado, gracias a la mayoría absoluta de los partidos en el Gobierno, devolver las cuentas al Ejecutivo autonómico. Así, el
presupuesto sanitario del País Vasco para el próximo ejercicio seguirá su curso, a falta de las
enmiendas parciales, para su aprobación definitiva el próximo 22 de diciembre.
De los 72 parlamentarios que han acudido al debate y a la votación parlamentaria, un total de
39 han votado en contra de aceptar las enmiendas a la totalidad, frente a los otros 33 que sí se han mostrado favorable a ello. Si bien el Parlamento Vasco cuenta con 75 diputados, la ausencia de tres de ellos en la jornada de este martes no ha sido obstáculo para que la mayoría absoluta que refrenda al
Gobierno de Iñigo Urkullu pueda seguir tramitando sus cuentas del 2024.
Concretamente, el
Partido Nacionalista Vasco (PNV) logró en las pasadas elecciones regionales 31 asientos, que con los 10 del
Partido Socialista de Euskadi (PSE-PSOE), supera los 38 necesarios para la
mayoría absoluta.
En ese sentido, y ante la posibilidad de que se acepten enmiendas parciales,
Euskadi contará el próximo año con cerca de 15.000 millones de euros, de los cuales casi
4.900 millones irán a Salud. Se trata de un monto que permitirá “hitos importantes”, según argumentó la consejera de Salud,
Gotzone Sagardui, en su
comparecencia en la Comisión de Salud del Parlamento Vasco para explicar y detallar la partida que su departamento gestionará. Son unas cuentas que, tal y como auguró Sagardui, servirán para “seguir reduciendo las
listas de espera y la demora de la atención sanitaria”.
Próximo ‘reto’, las enmiendas parciales
A priori, la cifra de los 4.900 millones que gestionará Salud no variará demasiado. Ahora, no obstante, a los partidos en el Gobierno les tocará negociar, en su caso, las
enmiendas parciales presentadas por los grupos de la oposición.
EH Bildu, Elkarrekin Podemos y Partido Popular tienen presentadas ya sus enmiendas, además del Grupo Mixto. En cuanto a la
coalición abertzale, los de Arnaldo Otegi presentaron un total de
61 enmiendas parciales por valor de 181 millones de euros. Gran parte de esas correcciones van dirigidas a
reducir las listas de espera de Osakidetza, que es su objetivo “prioritario y urgente”, según confirmaron a este diario. También han enmendado otras partidas en pro del
fortalecimiento de la Atención Primaria.
Elkarrekin Podemos, coalición formada por Podemos-Ahal Dugu e Izquierda Unida, pidió al equipo de Sagardui
aumentar el presupuesto en las redes de salud mental, en la
mejora de la cartera de servicios, así como en la
publificación de emergencias y transporte público. Además, la coalición de izquierdas reclamó a la Consejería elaborar un “
plan de refuerzo de la sanidad pública”.
Pero las enmiendas no llegaron única y exclusivamente desde el lado de la izquierda política, sino que también de la derecha, pues el
PP vasco presentó correcciones a las cuentas del 2024 por valor de unos
72 millones de euros en materia sanitaria. Destacan, entre las enmiendas de los populares, el
fortalecimiento de la Red de Salud Mental de Euskadi y de la Red de Transporte Sanitario Urgente.
“Falta de alternativa presupuestaria”
Durante el pleno de este martes en el Parlamento Vasco,
Pedro Azpiazu, consejero de Hacienda del Ejecutivo autonómico, ha afeado a la oposición que “nadie da alternativas” al proyecto presupuestario presentado por el Gobierno. “Decir que no es muy fácil, pero proponer alternativas no tanto”, ha denunciado Azpiazu.
“Qué decir de
Osakidetza. Este presupuesto se ha hecho en su cuarenta aniversario, en medio de una decadencia indisimulable”, ha respondido
Nerea Kortajarena, portavoz de Bildu en la cámara. Elkarrekin Podemos, por su parte, ha denunciado el “modelo de
colaboración público-privada”. “Es un eufemismo para hablar de privatización”, ha apostillado
Miren Gorrotxategi, líder de la coalición.
Y, por último, en representación del PP, su ya expresidente del partido y todavía parlamentario,
Carlos Iturgaiz, ha ironizado sobre el ciclo electoral en el que está sumido Euskadi, recalcando que este presupuesto "lo presenta un Gobierno que no lo va a ejecutar". “A este Gobierno, en el mejor de los casos, o en el peor, según cómo se mire, le quedan
pocos meses de actuación”, ha añadido.
Elecciones en Euskadi, en 2024
Y es que el País Vasco se verá abocado a las
elecciones autonómicas antes del primer semestre del próximo año. Previsiblemente, los comicios en Euskadi serán en
primavera, y es por ello que desde la oposición han recalcado, en más de una ocasión, que
el Gobierno de Urkullu “está en funciones”.
Dichas declaraciones se han realizado tras los últimos cambios y relevos que está habiendo en la comunidad, como son los anuncios de los dos grandes partidos de la región. El
PNV ha decidido no contar con Iñigo Urkullu,
lehendakari durante las últimas tres legislaturas, para revalidar su sillón de mando en Lakua, mientras que
Arnaldo Otegi se ha autoexcluido de la lucha por Ajuria Enea, dejando el puesto de candidato a lehendakari para otro miembro de EH Bildu.
Los peneuvistas han optado por
Imanol Pradales, hasta ahora en la Diputación de Bizkaia, mientras que la coalición abertzale se ha decidido por
Pello Otxandiano, director de programas de Bildu. No obstante, la última palabra será de las bases, que tendrán que ratificar esos nombramientos orgánicos.
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