Cataluña vuelve a llevar al Congreso la desregularización de la eutanasia

El Parlament catalán volverá a llevar al Congreso el proyecto de ley para modificar el Código Penal y despenalizar la eutanasia y el suicidio asistido, para recuperar una iniciativa que cayó al terminar la legislatura, ha explicado en rueda de prensa este viernes en la Cámara catalana la consellera de Salud de la Generalitat, Alba Vergés.

Lo ha acordado la Mesa de partidos y entidades para regular la eutanasia, en la que se han reunido todos los grupos del Parlament, excepto el PP, y la Associació Dret a Morir Dignament, y Vergés ha destacado que hay en este sentido un "consenso absolutamente mayoritario en la sociedad" y mucho interés parlamentario.

También han acordado empezar a regular desde el Parlament cómo se hará la eutanasia y el suicidio asistido para casos de enfermedades terminales e incurables en el sistema sanitario catalán, con el fin de tener la normativa preparada "con las máximas garantías" --también legales-- cuando termine la despenalización en el Congreso.

Vuelve a la ruta de las Cortes

Para poder volver a plantear en el Congreso ésta despenalización, el pleno de finales de mayo deberá pedir a la junta de portavoces que la Mesa del Parlament reclame a la Cámara baja estatal que vuelva a debatirse, una vez esté constituida la Mesa tras las elecciones generales, el proyecto de ley aprobado en 2017 --que reforma un artículo del Código Penal--.

Con ambos acuerdos, se logra acortar el plazo para que pueda llevarse a cabo esta práctica, ha dicho Vergés, que ha subrayado se trata de un debate que se inició hace 20 años y que esta normativa será muy relevante para algunas personas, y contemplará la objeción de conciencia de los profesionales.

Una mayoría social favorable

La presidenta de la entidad, Isabel Alonso, ha celebrado que volverá a recorrerse el camino hacia el Congreso pero esta vez se hará con más rapidez: "Ahora tenemos las condiciones ideales para la despenalización de la eutanasia", ya que se ha pasado del 84 por ciento al 87 por ciento de la opinión pública favorable, según el último estudio de opinión durante las elecciones.

También ha visto más voluntad política: "Nos hemos encontrado que en las elecciones generales todos los partidos excepto el PP y Vox han manifestado y escrito en sus programas que despenalizarán la eutanasia", y ha atribuido parte del aumento de la opinión pública al caso reciente de Ángel Hernández, que ayudó a morir a su mujer, María José Carrasco.

"Tenemos muy cerca la ley. Queremos la mejor ley posible lo más rápido posible porque la ciudadanía que se encuentra en situación de muerte y quieren adelantar esta muerte no puede esperar más", y ha señalado la ley holandesa como un buen ejemplo, como indicó también el Comité de Bioética de Catalunya en 2007.

"Se trata de respetar la voluntad de las personas", y leyes como la holandesa y la belga ponen condiciones para que la ayuda pueda ser ofrecida, entre las que ha dicho que debería incluirse los casos de enfermedad incurable aunque no sea terminal, cuando se haya hecho esta petición reiteradamente.