Redacción. Valladolid
La Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León comenzará la próxima semana a tramitar formalmente el decreto que regula la gestión clínica tras los buenos resultados obtenidos en los proyectos piloto desarrollados en el Servicio de Psiquiatría del Complejo Asistencial de Zamora y en el de Cardiología del Hospital Clínico de Valladolid.
Así lo ha afirmado el propio consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado, durante una jornada para la presentación del informe Amphos de análisis y mejora de la gestión hospitalaria, del que, en su opinión, se deduce la necesidad de más autonomía en los centros y, dentro de ellos, su traslado a los equipos profesionales como garantía de organización más eficiente de los hospitales.
Antonio María Sáez Aguado. |
En este contexto, Sáez Aguado ha explicado que, en este sentido, la Consejería trabaja con la puesta en marcha de las unidades de gestión y la próxima semana se empezará a trabajar en el decreto que las regula. Todo ello después de una evaluación “preliminar” de los resultados cosechados en los proyectos piloto puestos en marcha en Zamora y Valladolid, de los que se cumple un año de su puesta en marcha, por lo que en breve se hará una evaluación definitiva.
Los primeros resultados, según el consejero, demuestran que el funcionamiento de las unidades ha mejorado y en el caso del Servicio de Cardiología del Clínico tiene mejores indicadores de funcionamiento, resultados, calidad y gasto.
Por su parte, en el Servicio de Psiquiatría de Zamora, que tiene “algunas especificidades”, por ejemplo se han conseguido reducir de una manera “importantísima” las necesidades de hospitalización de pacientes agudos “hasta el punto de que se han reducido camas de hospitalización” porque hay un menor índice de ocupación, ya que los pacientes se atienden en sus domicilios o en hogares supervisados.
Impulso a este sistema
De esta forma, los resultados positivos “animan a dar el impulso” y a llevar a cabo la regulación de la gestión clínica mediante el citado decreto, tras lo cual se hará una convocatoria para que los equipos profesionales hagan sus propuestas.
En concreto, se les pedirá que se defina un proyecto de cuatro años para un servicio hospitalario o varios, de la misma forma en Atención Primaria, en el que pongan de manifiesto “hacia dónde quieren dirigirse”, con qué tipo de cambios organizativos, recursos, indicadores de actividad, calidad, gasto, satisfacción, etcétera.
Así, una vez hechas las propuestas se autorizarán formalmente las unidades de gestión, con lo que comporta desde el punto de vista de su autonomía, que tendrá tres grados que deberán ser progresivos. Además, se establecerán las reglas de incentivos y de funcionamiento de cada una de ellas “para garantizar que sea una gestión no sólo del jefe de la unidad sino del conjunto de profesionales”, ha explicado el consejero, quien ha destacado la importancia de la implicación de equipos clínicos profesionales también en la gestión, con la utilización de los recursos que habitualmente deciden y en la organización de esos servicios.