Pablo Fernández, secretario general de Podemos en Castilla y León.
Podemos también le ha declarado la guerra a las Unidades de Gestión Clínica. El Grupo Parlamentario en las Cortes de Castilla y León ha registrado una iniciativa para la paralización inmediata del borrador que
crea las primeras unidades de este tipo en la comunidad autónomas.
La formación ha recriminado a la Junta en un comunicado que haya "aprovechado" para presentar este proyecto a la Mesa Sectorial "sabiendo que
no cuenta con el respaldo de los trabajadores de la Sanidad pública que se han opuesto reiteradamente a estas Unidades de Gestión Clínica".
Para Podemos, las Unidades de Gestión Clínica "
antepondrán criterios económicos" a la calidad asistencial y a los derechos y condiciones laborales de los trabajadores "que impedirán que los profesionales sanitarios desempeñen correctamente su trabajo".
Un día antes era el propio
sindicato CCOO quien alertaba del riesgo que entrañaban estas nuevas unidades, basándose en el criterio empresarial que las regiría y que sería "el principio del fin de la sanidad pública".
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