En 2015, el Servicio Cántabro de Salud (SCS) convocó su OPE de Enfermería a la que llegaron a presentarse 3.000 aspirantes. Cerca de 1.000 graduados aprobaron los exámenes que se realizaron en 2017 y siguen sin saber si tienen alguna de las 44 plazas que fueron prometidas.
"Parecía que en marzo de este año iba a avanzar la cosa porque pidieron los méritos a todos los aprobados en 2017. Sin embargo, estamos a principios de octubre y no hemos recibido ninguna otra respuesta", han apuntado desde Satse Cantabria a Redacción Médica.
"Ahora mismo, el millar de aprobados ha vuelto a pagar las tasas para presentarse a la gran OPE de estabilización que fue convocada en 2017 y que realizará las pruebas en mayo de 2019. Eso significa que todos los que habían aprobado se están volviendo a preparar para un examen que ya aprobaron en su momento", han explicado desde el sindicato.
La falta de personal en la Administración es el problema, según han apuntado desde Satse. "Falta gente que proceda al estudio de la
La OPE de Medicina de Familia sí fue resuelta
baremación de los méritos, un hecho que ha provocado que los aprobados no sepan si tienen o no su plaza".
Por el contrario, los aspirantes que realizaron las pruebas de Medicina de Familia al mismo tiempo que las de Enfermería sí que consiguieron que su concurso fuera resuelto y tienen sus plazas asignadas desde hace tiempo.
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