Con esta medida se reducen considerablemente las emisiones de CO2 a la atmósfera.
24 nov. 2016 11:00H
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El Hospital Doctor José Molina Orosa, de Lanzarote, ha obtenido el Certificado de Eficiencia Energética, después de que alcanzara una calificación correspondiente a la letra C, con unas emisiones de dióxido de carbono de 48,8 kg CO2/m2 año, muy próximas incluso a las correspondientes a la calificación inmediatamente superior o letra B.
El certificado, que ha sido registrado por la Consejería de Economía, Industria, Comercio y Conocimiento del Gobierno de Canarias, es válido hasta 2026. Se trata de un documento oficial que concluye el estudio y análisis de las características energéticas del edificio, calificando energéticamente el inmueble y calculando el consumo anual de energía necesario para satisfacer la demanda energética del mismo en condiciones normales de ocupación y funcionamiento. Una vez obtenida esta certificación, la Gerencia del hospital trabaja continuamente por alcanzar una mejor calificación energética y, por ende, un edificio más sostenible.
Otras medidas para aumentar la eficiencia energética
Actualmente se está trabajando en la implantación de varias medidas de eficiencia energética, entre las que destaca el aprovechamiento de la energía geotérmica de baja entalpía, para utilizarla como apoyo en la producción de agua fría para climatización y para la producción de agua caliente, haciendo uso del rechazo o energía residual. Con esta medida se reducen considerablemente las emisiones de CO2 a la atmósfera y se optimizan los recursos energéticos previéndose unos ahorros estimados superiores a los 350 mil euros al año.
El estudio realizado se incluyen las características de todos los cerramientos, la producción de agua caliente, calefacción, iluminación, refrigeración y ventilación. Además, verifica que las instalaciones térmicas cumplan con los requisitos medioambientales exigidos en el momento de su instalación. Para ello los técnicos se valen de un programa informático habilitado por el Ministerio de Industria.
El proceso de certificación finaliza con la asignación de una etiqueta energética. La escala de calificación es de siete letras desde la A (edificio más eficiente energéticamente) y la G (edificio menos eficiente energéticamente).
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