Redacción. Palma
El sistema sanitario público de Baleares está "subfinanciado" entre 270 y 300 millones de euros cada año en relación a la media de las comunidades autónomas, según un informe del Cercle d'Economia de Mallorca que reclama un cambio del modelo asistencial que apueste por la eficacia.
La comisión de sanidad del Cercle d'Economia de Mallorca ha elaborado el informe "Sistema Sanitario Balear: Diagnóstico, pronóstico y tratamiento", en el que subraya que la sanidad ha de tener una financiación suficiente, ha informado la entidad en un comunicado.
"Pensamos que los recursos sanitarios deberían tener carácter finalista, con tesorería diferenciada y asignados en función de la necesidad sanitaria de cada región, mediante un sistema de capitación ponderada", señala el estudio.
El Cercle d'Economia apunta además que la insularidad es un factor importante que presiona los costes sanitarios al alza, y debe ser suficientemente tenida en cuenta, por lo que las islas precisan de un Régimen Especial de Baleares riguroso, con un coste específico para paliar la insularidad que determine las diferencias reales en materia de financiación.
En opinión de la entidad, la crisis financiera no es principal causa de los problemas del sistema sanitario, pero ha generado "una tensión sin precedentes a las costuras del sistema", que ha hecho aflorar déficit importantes en casi todas las comunidades.
En el caso de Baleares el déficit de financiación de la sanidad es crónico y sitúa las islas "en el furgón de cola del gasto sanitario por persona protegida" lo que ha producido una diferencia, en los últimos años, de 291-266 euros por persona respecto a la media de las comunidades y de 609-566 euros en relación a las que mayor inversión realizan.
El Cercle advierte además de que esta situación se da en una de las comunidades que históricamente cuenta con una de las mayores tasas de seguros privados, de un 22 % de la población, según la última encuesta nacional de salud de España 2011/2012.
De no darse esta circunstancia, la presión que se añadiría al sistema sanitario público agravaría aún más la situación en términos de gasto, listas de espera o frecuentación de urgencias, "pudiendo suponer el colapso o una importante sobrecarga del sistema".
La comisión de sanidad del Cercle d'Economia concluye que es necesaria una reforma del modelo asistencial que se adapte a las nuevas necesidades y del modelo de gestión, con más profesionalización y calidad, con una utilización óptima de la estructura y de los recursos disponibles.
La entidad pide un pacto de buen gobierno que permita avanzar en la calidad, productividad y eficiencia del sistema tanto en el ámbito público como en el privado, dejar de gastar en tratamientos ineficaces o inútiles, evitar duplicidades y "actuar siempre bajo la premisa de la limitación de los recursos disponibles", además de implantar una necesaria evaluación permanente.