Angulo: "Pido a Enfermería que dialogue con los médicos, me da igual dónde"

Después de un año de impasse político en el que cada acción política era un acto de campaña, ha arrancado una legislatura marcada por dos palabras, en boca de todos, al menos de momento: diálogo y consenso. En lo sanitario está por ver hasta dónde llega esta voluntad de llegar a acuerdos, tras una primera Comisión de Sanidad con grandes acuerdos en talidomida y transparencia, pero desencuentros en temas claves como son las herramientas de financiación del sistema. Teresa Angulo ha recuperado su puesto de portavoz de Sanidad del Congreso tras la negativa de José María Eiros a repetir. Atiende a Redacción Médica en su despacho de la sexta planta del Congreso de los Diputados y habla de posibles pactos, de prescripción enfermera y de la nueva ministra de Sanidad.  
 
¿Por qué no aceptaron la propuesta de Fondo de Cohesión que propuso el PSOE?

Nosotros propusimos una enmienda para incluir el fondo del acuerdo con Ciudadanos para la investidura. Es un fondo específico para financiar los tratamientos que tienen que ser tratados en los centros de referencia y para medicamentos huérfanos.
 
La diferencia estuvo en que el Partido Socialista seguía empeñado en hablar del Fondo de Cohesión Sanitaria tal y como lo tenía establecido el Gobierno del Partido Socialista. Además con la financiación ponía la iniciativa del año 2011 que era de 87 millones de euros, porque el propio Partido Socialista le quitó 12 millones de euros al fondo. Nosotros lo que decíamos es que el Fondo de Garantía Asistencial cubre más de lo que cubre el Fondo de Cohesión.

¿Cuándo se prevé la creación del fondo pactado con Ciudadanos?
 
Acabamos de arrancar la legislatura y estamos intentando llevarlo a cabo. Vamos a cumplir los acuerdos con Ciudadanos y sabéis que el Gobierno tiene que traer a las Cortes Generales el techo de gasto. Hasta que no tengamos el techo de gasto no podemos empezar a tramitar los presupuestos y concretar estas medidas.

Angulo habla sobre el conflicto de la temporalidad y la nueva ministra.

¿Ha cambiado la postura del PP en relación a la prescripción enfermera?

La indicación, uso y dispensación de medicamentos de uso humano producto sanitario por parte de la Enfermería se desarrolló en el Real Decreto como venía en la Ley de uso racional de medicamentos. Al final es una cuestión técnica y en una época en la que se nos pide consenso, pediría a la profesión enfermera que inicie ese diálogo o retome ese diálogo con los médicos.


¿Ese diálogo debería de estar auspiciado por el Ministerio de Sanidad?

A mí me da igual cual sea el foro del diálogo. Yo estoy segura  que se propiciará, pero lo importante es que hablen, que se pongan de acuerdo y que valoren la situación.

Pero los enfermeros, por ejemplo, hablan de un conflicto donde no lo había. Mencionan problemas para la calidad asistencial y llegan a decir que incluso se sienten un poco desprotegidos jurídicamente.

No. Entendemos que este Real Decreto les otorga mayor seguridad jurídica, porque se dice que es lo que tienen que hacer y se desarrolla la ley. Se dice cómo deben que actuar en el uso, indicación y dispensación de medicamentos y en ningún momento se hablaba de prescripción

¿Qué medidas se van a tomar para mejorar la temporalidad?
 
Lo que dice la sentencia es que las administraciones sanitarias competentes, en este caso las comunidades autónomas, no están haciendo una buena aplicación de la norma. Por lo tanto, los pasos que dio el Ministerio, de reunirse con las CCAA y con los sindicatos, han sido rápidos y van en la buena dirección.
 
Lo primero es que hay que hacer es conocer la situación real de cada comunidad autónoma y qué grado de temporalidad tiene. Andalucía está en unos límites de más del 30 por ciento. Habrá que ver qué grado de temporalidad y en qué plazas se está utilizando el recurso a la contratación temporal de manera prácticamente indefinida. Esa plaza debe convertirse en estructural porque lo dice la norma.
 
¿Ven factible reducir la presión fiscal a la industria?

Eso es meternos en temas de Hacienda, pero creo que hay un compromiso claro por parte del Gobierno de no subir impuestos que afecten directamente a la renta o que afecten directamente a los ciudadanos. De lo que se trata es de intentar poder cumplir con nuestros objetivos de déficit y hacer el Impuesto de Sociedades lo más ajustado posible a lo que es real. Dependerá de la negociación de los presupuestos y estoy segura de que se hará sin perjudicar de ninguna manera a la industria.

Angulo en un momento de la entrevista.

¿Está preparada Dolores Montserrat para ser ministra de Sanidad?
 
Seguro que sí porque es una persona con mucha vitalidad, ganas de trabajar, capacidad de dialogar, de escuchar, de aprender, de conocer y de querer estar informada de los temas que nos ocupan a todos. He tenido la oportunidad ya de reunirme con ella y la verdad es que fue una reunión muy grata porque ella tiene muy claro que debe ser la legislatura del diálogo. Tenemos que trabajar por ser capaces de llegar a ese gran pacto por la sanidad. No se debe politizar porque hay cuestiones que no son ideológicas en sanidad, sino que son cuestiones de resolver los problemas de los ciudadanos teniendo un sistema sanitario sostenible de calidad y lo más equitativo posible. Ella eso lo tiene meridianamente claro. A mí me contagia esas ganas de trabajar y esa ilusión con la que ha llegado al Ministerio.

En su primera intervención en el Senado, la ministra afirmó que antes del 2012 la universalización de la sanidad era un mito. ¿Está usted de acuerdo con esa afirmación?
 
Totalmente. Lo hemos repetido hasta la saciedad. A veces hay grupos políticos o personas que a base de repetir una mentira quieren hacerla verdad, y no es así. En ese país había más de 200.000 profesionales liberales que no tenían derecho a la tarjeta sanitaria, no tenían derecho a la asistencia sanitaria pública. El PSOE cometió la crueldad de sacar del sistema sanitario a los parados de larga de duración que habían perdido ya sus subsidios. Eso es lo que nosotros hemos regulado, es decir: ahora todas esas personas profesionales liberales que no tenían derecho a la sanidad pública la tienen y los parados de larga duración han recuperado la asistencia sanitaria.

Sin embargo, Amnistía Internacional cifra en casi 800.000 las personas que han perdido la asistencia sanitaria por ser inmigrantes.

En este país se aprobó la regulación para la asistencia sanitaria a las personas que están en situación irregular en España, es decir: las personas que vienen de otros países a trabajar o a vivir en España en situación regular tienen el derecho a su tarjeta sanitaria, pero las personas que estaban en situación irregular en España tienen derecho a la asistencia sanitaria en las mejores condiciones de todos los países de Europa. Pero no con una tarjeta sanitaria como tal porque eso lo que nos estaba propiciando era el turismo sanitario. Nos encontrábamos que personas que habían estado aquí tenían la tarjeta sanitaria y se iban de nuestro país a recibir atención sanitaria en Francia, en Alemania, en Rumanía o en cualquier país de la Unión Europea, y lo hacían con la tarjeta sanitaria española y pasaban la factura a la sanidad española
 
Sí se facilita la asistencia sanitaria, pero con un documento que no te permita exportar luego el derecho si abandonas el país. Es tan sencillo como eso. Respecto de las 800.000, los datos son al revés: hay 800.000 tarjetas sanitarias más en España que cuando el Gobierno del Partido Popular llegó, precisamente porque se han incorporado además ciudadanos españoles que no tenían derecho a la sanidad pública.

Angulo ha recuperdado su puesto de portavoz en el Congreso.

¿No cree que el hecho de que en cada debate parlamentario se hable de derogar el Real Decreto 16/2012 es una barrera para llegar a acuerdos? ¿Estarían dispuestos a modificar en alguna medida del Real Decreto 16/2012?

Desde el diálogo todo se puede mejorar. Pero a mí me gustaría que estos partidos que piden la derogación del Real Decreto 16/2012 le explicaran a los ciudadanos que los parados que no tenían prestación, que ahora no pagan por sus medicamentos, van a tener que volver a pagar el 40% de los medicamentos que es lo que había antes del Real Decreto 16/2012.
 
Lo que hizo el Partido Popular es un sistema de copago más justo, porque se paga en función de renta no en función de la situación laboral. Ahora, se pueden revisar algunas cosas, a lo mejor en los tramos de esos copagos.
 
¿En qué puntos ve que pueden tener más cercanía tanto con el PSOE como con Ciudadanos?

Sé que podremos llegar a acuerdos. Con Ciudadanos firmamos un documento de 150 medidas en las que vienen una serie de propuestas materia sanitaria y que nosotros, como no puede ser de otra forma, vamos a cumplir. Creo que todos estamos por la labor de garantizar las sostenibilidad de nuestro sistema sanitario, hacer el sistema lo más equitativo y lo más cohesionado posible y acabar con las desigualdades. También en la necesidad de adaptar nuestro sistema sanitario a un modelo de atención al paciente crónico y no tanto al agudo, porque el modelo ha cambiado y por lo tanto, las necesidades de desarrollar la integración de la atención sociosanitaria.
 
¿Cuál es su postura sobre gestión clínica? ¿Cree que los enfermeros pueden evaluar y supervisar a médicos y viceversa?

La gestión clínica es una buena medida porque contribuye a hacer corresponsables también a los profesionales y se le dan más participación en sus unidades. Es un tema que habrá que volver a poner en marcha para ser capaces de saber cuáles son las competencias que cada uno tiene. Habrá unidades que podrá dirigir una persona o unidades de cuidados de Enfermería que podrá gestionar un enfermero. A mí me gustaría que se haga desde el diálogo.
 
Recientemente ha habido cierta polémica sobre una serie de concesionarias privadas, ¿Qué opina de ello? ¿Cree que puede ser un argumento para reducir la colaboración público-privada?

Es lo que te decía antes, lo importante es la atención sanitaria y la prestación sanitaria que se le da al ciudadano y que esta sea de la máxima calidad. En el Sistema Nacional de Salud cabemos todos. Por lo tanto, las fórmulas de colaboración público-privadas, están reguladas por una ley que aprobó el Partido Socialista. Haciéndose con todas las garantías que ofrece la ley y siempre garantizando que el ciudadano reciba esa prestación sanitaria de calidad y de manera gratuita en el sentido de que está pagada con sus impuestos, está bien. Entrar en esos debates tiene más una carga ideológica o una carga de querer de revertir lo que han hecho otros simplemente, que de pensar en el bienestar de los ciudadanos.